En 2021, la Fórmula 1 revisará sus fines de semana reduciendo los entrenamientos libres y probará en algunas pruebas un nuevo formato, una carrera más corta, el sábado en preámbulo de la tradicional cita dominical.
Una hora menos de ensayos. Desde este primer fin de semana inaugural en Baréin, el primero de una temporada maratón de 23 carreras -si el covid-19 lo permite- las dos sesiones libres del viernes solo durarán una hora cada una. Antes alcanzaban la hora y media.
Reduciendo los ensayos a tres horas (sumando la hora del sábado) la F1 quiere hacer los entrenamientos más animados. La organización también quiere fijar los tiempos de las escuderías, ya que muchas de ellas utilizan menos del que disponen.
“Esto va a cambiar la información que obtenemos sobre los neumáticos y la cantidad de trabajo que tenemos para hacer los reglajes”, explicó Marcin Budkowski, director ejecutivo de Alpine, la nueva identidad de Renault en F1.
“Vamos a estar menos preparados para la carrera y las escuderías detestan eso. Pero en consecuencia las carreras serán menos previsibles, lo que está bien para los aficionados”, añadió.
¿Agradar a los espectadores pero perjudicar el deporte? Es el miedo de algunos puristas frente a la llegada probable, como experimentación esta temporada, de las carreras esprint los sábados.