Llega de la mano con el estilo manga
Nuestra invitada de turno es una de las artistas más reconocidas del medio en cuanto a cómic se refiere. Ella ha trabajado ampliamente con ilustraciones sobre personajes de la cultura local, fanarts y personajes de fantasía y también realiza ilustraciones a pedido. Su estilo está muy orientado al manga y estilo americano y, dado lo prolífico de su trabajo, tiene muchísimas obras que sin duda hemos podido disfrutar en una las cientos de ferias de publicaciones en las que ha participado. Sin duda Rafaela es una de las pocas historietistas en Bolivia que vive exclusivamente del arte. Con una fijación artística puesta en la cholita boliviana, hoy conocemos más de su vida y obra en esta exclusiva para Cvltvral.
¿Quién es Rafaela?
Una dibujante de tiempo completo que no sale nunca de su casa.
¿Cómo y cuándo descubriste tu aptitud artística?
Lo descubrí súper tarde, casi a los 22 cuando muchos de mis colegas ya tenían una carrera hecha.
Siempre estuve muy ligada al arte, toda la infancia hice ballet clásico y en mi adolescencia estuve en el Conservatorio Nacional de Música, pero mi potencial estaba en el dibujo y nadie lo sabía, ni mis papás, tampoco yo. Fue casi de casualidad.
¿Qué buscas comunicar mediante tus innumerables trabajos?
Más que todo historias, ya que soy historietista en un 80 % de mi tiempo quiero contar cosas, me gusta mucho que el dibujo se mezcle con texto y fluya.
¿Qué autores han influenciado en tu arte?
Yukito Kishiro (BattleAngel Alita), Masamune Shirow (Tank Police Dominion), Brian Lee O’maley (Seconds), Marjane Satrapi (Persépolis) y el que más más… Osamu Tezuka.
¿Cuál es la importancia de ser contestataria cuando realizas obras como las tuyas? ¿O dirías que las obras son contestatarias en sí?
Hay una importancia implícita cuando ya se lanza la idea de una ilustración o una obra contestataria. Ya uno sabe que esa obra “picará” de alguna manera a un grupo específico, tan solo en ya formar la idea en la cabeza tienen su toque de malicia y comedia al mismo tiempo.
¿Cuánto consideras que tu trabajo ha aportado al arte y cómic bolivianos?
Wuaaa… qué pregunta tan difícil de contestar, realmente creo que no me esperaba una pregunta así. Si respondiera con la falsa modestia (que se estila de los historietistas en general) diría “que ni mucho, que muchos lo hicieron más que yo”, pero como soy bien original, respondo que sí, influí en algunos artistas, me lo vinieron a decir ellos mismos, nuestras publicaciones llegaron a muchas personas que jamás conocimos, supongo que hay una huella allí, ojalá no la borren de manera intencional.
¿Qué tanto has ahondado
en publicaciones autobiográficas?
Muy poco, aún mi vida no es tan interesante, tal vez después.
Dado que tu trabajo es tan prolífico sé
que será difícil elegir, pero ¿cuál es el
top 3 de tus obras, las cuales son
más representativas en tu carrera?
La más representativa es nuestra obra de En la Guerra del Chaco (2015) que ya tiene tres ediciones consecutivas desde el 2019. Se la considera un nuevo clásico de la literatura boliviana, un hito que es difícil de conseguir en la narrativa gráfica. La de la Dictadura también tuvo muy buenas críticas, es la que más se la exportó; y, finalmente, aunque de manera más underground: Helvete, novela gráfica acerca del inicio del Black Metal Noruego. Tuvo mucho calado en este grupo social, ahora bien, yo tengo mis favoritas personales, pero son de un alcance un tanto menor.
¿Te ha servido esta pandemia
y el encierro para poder crear
más de lo habitual?
No, lamentablemente no, por desgracia la pandemia también me trajo ciertas tragedias familiares, muy difíciles de superar, por lo tanto, no he podido crear tanto como debería (o necesitaba).
¿Qué publicaciones
presentarás en meses venideros?
Ya tenemos lista nuestra tercera novela gráfica histórica: “Indio”, acerca de la rebelión de Tupac Katari, también estamos preparando una comedia oscura y corta acerca de la vida de un profeta muy importante.
Portada de HOY |
Editorial |
Portada Deportes |
Caricatura |
Impunidad |