Aumenta contrabando de cerveza en Yacuiba

A escasos kilómetros de la frontera que separa Bolivia de Argentina, en el mercado de Yacuiba, bajo el fuerte sol chaqueño, el turista tiene dos opciones para hidratarse: comprar una botella con 500cc de agua de mesa por cinco bolivianos o una lata de cerveza Schneider de 710cc por cuatro.

La devaluación constante del peso argentino, las políticas protectivas de la industria en el vecino país, la abismal diferencia en la escala de mercado y, sobre todo, el contrabando, que a la vez es causa de los anteriores factores, han llegado a distorsionar a ese punto el mercado de consumo: el agua es más costosa que la cerveza.

Aunque todo el día se puede observar el constante tránsito de galletas, golosinas, productos de limpieza... de un lado al otro de la frontera, la mercadería que más nutre al contrabando es la cerveza. Las hay de diferentes marcas: Quilmes, Schneider, Corona, Stella Artois, entre otras.

Un cálculo aproximado permite establecer que al menos el 60 por ciento del contrabando que ingresa de Salvador Mazza (Argentina) a Yacuiba (Bolivia) es cerveza.

FRONTERA CERRADA

Desde el inicio de la pandemia en Bolivia, hace más de un año, la frontera entre ambos países se encuentra cerrada. Paradójicamente, en lugar del único paso fronterizo legal, se han abierto muchos otros senderos irregulares a ambos lados del puente que separa ambos países.

En medio de la quebrada seca y poblada de tártagos, hay decenas de caminos precarios transitados por centenares de personas. Hablando con los pocos bagayeros que se animan a contar algo de su experiencia, explican que las necesidades económicas derivadas de la paralización del comercio por la pandemia, les obliga a buscar formas alternativas de llenar la canasta de víveres, el contrabando es una de las pocas salidas en tiempos de crisis.

EFECTOS EN LA

ECONOMÍA

Un estudio realizado por la consultora internacional de investigación de mercados Euromonitor, reveló que el contrabando de cerveza ha crecido en Bolivia un 39 % en los últimos 3 años, entre 2016 y 2019, llegando a cifras nunca antes alcanzadas.

Además, el informe muestra que el tamaño del mercado ilegal de bebidas alcohólicas en Bolivia representa el 15 % del total del mercado de bebidas en el país, lo cual tiene un alto impacto en la salud de la población por la falta de controles sobre la calidad y el estado de esos productos importados de forma ilegal.

Según el análisis, la industria cervecera del país es la más perjudicada por el contrabando, dado que el ingreso de cerveza ilegal representa el 50 % del total del mercado ilegal de bebidas alcohólicas, con graves riesgos para la producción y el empleo de mano de obra boliviana.

En términos generales, el contrabando afecta directamente los ingresos del país en aproximadamente 1.800 millones de dólares cada año, aunque la cifra puede quedar chica frente al fenómeno que claramente se ha incrementado de forma dramática el año pasado.

Las autoridades aduaneras no han respondido los requerimientos de información por parte de varios medios de comunicación durante el último mes. La responsable de la lucha contra el contrabando en Yacuiba ha derivado las solicitudes de entrevistas a la Aduana Regional de Tarija y esta a las oficinas centrales de la Aduana Nacional, pero hasta el momento, no hay respuesta.