Animales que duermen poco o nada

Entre los reptiles que duermen muy poco está la tortuga. Al margen de vivir más de 150 años, su metabolismo funciona con bastante lentitud, y el desgaste de energía es de igual manera lenta. Por lo Tanto, no duerme casi nada durante el transcurso de su vida. Si alguna vez esconde su cabeza dentro de su caparazón es para ponerse a salvo de algún enemigo. En otras ocasiones mete la cabeza para descansar y reparar las pocas energías que gasta este reptil, símbolo de la pereza.

En el mar también hay animales que no duermen, por ejemplo: los tiburones y los delfines no duermen, deben estar en constante movimiento para permitir que el agua rico en oxígeno sea absorbido por estos animales. Quedarse dormido sería prácticamente un suicidio.

Otro animal que duerme poco es el elefante, pese al tamaño y al peso de su cuerpo, le basta dormir de tres a cuatro horas, no puede darse el gusto de dormir más horas, ya que su instinto le dice que debe estar siempre en vigilia ante los peligros que acechan en la selva. Además, el volumen de su cuerpo necesita ser alimentado con más frecuencia, entonces debe recorrer enormes distancias en busca de pastizales.

Así como hay animales que duermen poco o nada, también hay otros que hacen del sueño una costumbre. Por ejemplo el zorro pasa parte del día durmiendo, pero apenas el sol se esconde en el horizonte, sale de cacería, recorre largas distancias, lo que ocasiona mayor desgaste de energías, por lo tanto necesita dormir más horas para reponerse. Otros como el oso, el lirón, las ardillas duermen gran parte del invierno frío, pero con la llegada de la primavera se vuelven muy activos.