El análisis que hace el Banco Mundial sobre las economías en los distintos países, señala que el proceso de nacionalización y la reforma del marco jurídico en curso están afectando el clima de inversiones y, potencialmente, podrían reducir a mediano plazo las perspectivas de crecimiento.
El documento señala, además, que los sectores de hidrocarburos, minería y electricidad están cerca de operar a su máxima capacidad y pocos proyectos de inversión grande se han generado en los últimos años.
También añade que si la economía mundial se recupera, la inflación en Bolivia podría aumentar debido a los precios internacionales de los alimentos más elevados y la entrada de divisas, mientras que la competitividad de las exportaciones intensivas en mano de obra no tradicionales podría verse afectada por la apreciación del tipo de cambio.