Un segundo capítulo del traslado de vehículos de Challapata a Oruro se cumplió ayer cuando 44 de los motorizados que estaban en los garajes precintados fueron trasladados en una tarea conjunta de la Policía y el Ejército en esta localidad.
En Challapata las Fuerzas Armadas aún movilizan patrullas que controlan diversos puntos fronterizos por donde habitualmente ingresan esos vehículos ilegalmente.
En tanto, el ministro Carlos Romero informó a El Diario que los vehículos trasladados a Oruro cumplirán un fin social, que se determinará posteriormente y en ningún caso serán subastados.
“Lo primero que se tiene que hacer es asignar a un custodio para preservar estos vehículos. La figura de subasta nacerá una vez que se apruebe la Ley de Extinción de Dominio de Bienes”, señaló Romero.
También se refirió al caso de los vehículos que carecen de documentación y que circulan en los Yungas de La Paz para señalar que si se agrupan para evitar la incautación de estos motorizados están incurriendo en un acto ilegal y en contra de la ley.
Un cálculo inicial señala que son aproximadamente 300 coches que no cuentan con la documentación respectiva y serían incautados en los próximos días.
Los propietarios de autos indocumentados del sector de los Yungas de La Paz formaron una asociación con la finalidad de que sus motorizados ilegales no sean decomisados por la fuerza como sucedió en Challapata.
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