El cambio climático aumentará la frecuencia, intensidad y duración de las sequías en el planeta, con repercusiones en numerosos sectores, en particular los de la alimentación, agua, salud y energía, advierte la Organización Meteorológica Mundial (OMM). En Bolivia se prevé que El Niño ocasione sequías en gran parte del altiplano, valles de Tarija, Valle Alto de Cochabamba y parte del Chaco.
La OMM a través de su secretario general, Michel Jarraud, recomendó apartarse de un enfoque fragmentado e impulsado por la crisis, ya que es necesario elaborar políticas nacionales integrales sobre la sequía basadas en la evaluación de riesgos.
La Unidad de Gestión de Riesgos del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), en su boletín informativo sobre las Condiciones Neutras y de Alta Probabilidad de ingresar a Condiciones El Niño 2012-2013 a partir de septiembre, muestra los escenarios probables a nivel nacional. En tanto, desde el Estado se prepara un Plan de Contingencia específico para prevenir desastres y mitigarlos a consecuencia de este fenómeno climatológico.
Ante la gran probabilidad de que se active a partir del último trimestre de este año, El Niño 2012-2013 en Bolivia, el Senamhi analiza la distribución de precipitaciones, que estará caracterizado por déficit en gran parte del Altiplano, valles de Tarija y el Valle Alto de Cochabamba.
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