INTELIGENCIA EMOCIONAL
“El triunfo real no debe causar dolor ni dañar a nadie”
Todo acto de iniciativa o de mejoramiento personal comienza con una decisión; de alguna manera, el nivel básico de nuestra vida ya está hecho y podríamos pasar moderadamente por la vida de este modo o de esta manera; sin embargo, si recordamos que hemos venido para aprender algo especial en esta vida, podremos darnos cuenta de que hemos venido a este mundo a aprender a manejar nuestro poder creador.
“La materia básica de nuestra vida son nuestros pensamientos” afirmaba yo mismo en alguno de mis antiguos artículos y recordando el principio que dice que la energía del pensamiento es creativa y se manifiesta a través de las palabras, de las imágenes mentales, de las creencias y de los actos o acciones para producir circunstancias, situaciones o resultados, pude darme cuenta de un hecho constante en toda vida humana: Siempre estamos pensando de maneras conscientes y subconscientes y por lo tanto, siempre estamos creando.
Nuestro proceso pensante formado por el diálogo interno interminable, por la evocación de recuerdos, por la formación de imágenes mentales nuevas y por la generación de nuevas conclusiones va generando nuestra realidad personal o nuestro mundo personal en que vivimos y si aprendemos a introducir nuevas palabras en ese diálogo interno interminable, podremos comenzar a generar cambios en nuestro proceso creativo y podremos ir comprobando la realidad y el hecho de que somos seres creadores.
Podemos darnos cuenta también de que estamos rodeados de vibraciones negativas, de situaciones negativas y de mucha negatividad las veinticuatro horas del día, los siete días de la semana, los doce meses del año y no es de extrañar que esta negatividad termine por causarnos alguna forma de estrés o de tensión mental y corporal extrema y es que la negatividad de los pensamientos y de los actos humanos genera vibraciones muy desagradables y se hace necesario encontrar algún modo o manera de cargar a nuestro subconsciente con pensamientos y vibraciones positivas que son los elementos que nos relajan y nos permiten cierto nivel de bienestar mental, corporal y relacional.
Nuestra voluntad de triunfar en esta vida puede restaurarse haciendo el ejercicio de regresión con las palabras inductoras: “Hay mucho dolor en mi voluntad de triunfar”; se debe repetir estas palabras por quince o veinte minutos hasta que salgan bostezos y otras sensaciones que podrían ser un tanto desagradables y después de completar el ejercicio, nuestra voluntad para triunfar queda habilitada y las preguntas que hay que comenzar a repetirse a sí mismo son las siguientes: ¿Qué decisiones tendría que tomar para comenzar a triunfar en la vida? ¿Qué acciones específicas tendría que emprender? ¿Con quienes tendría que charlar para llegar a acuerdos?
Una vez que tenga las respuestas debe llevar sus decisiones a la acción y luego debe perseverar revisando siempre si los resultados que está obteniendo son o no los que usted quiere obtener.
Sabiendo que este pequeño ensayo le servirá de alguna manera a usted o a algún ser querido, le felicito porque de alguna manera, comenzará a emitir vibraciones positivas y también iniciará algún cambio positivo o una mejora razonable en su aventura de vivir; nos vemos en el artículo de mañana.
Palabras del autor: “Unas palabras bien aprendidas y repetidas antes de dormir pueden producir cambios interesantes en la vida de cualquier persona: repita esta noche antes de dormirse: “Mi salud y mi carácter están empezando a mejorar”
Si desea tener una conversación con el autor o una consulta acerca de cualquier problema de su vida, llame a los teléfonos del encabezado (72513317-2488284-77787203).
Los problemas sólo se resuelven cuando se los afronta con seguridad.
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