Peugeot Sport, Red Bull y Total han decidido viajar a los espacios abiertos de Sudamérica, telón de fondo de la prueba de resistencia más dura del planeta. Inevitablemente, esta decisión recuerda el periodo de éxito de la marca del león, en el que dejó una huella indeleble en el Dakar al ganar la prueba cuatro veces seguidas, entre 1987 y 1990, primero con el 205 T16 Grand Raid y más tarde con el 405 T16 Grand Raid. Para esta versión, Sainz, considerado el mejor piloto de rally de España, tiene un “mounstruo”, la denominada “oveja negra”, un peugeot que está preparado para ganar el Dakar. Ya se han hecho las primeras pruebas y Sainz se alista para hacer podio con este prototipo. Será un espectáculo verlo en Bolivia.