El ministro Juan Ramón Quintana dijo que Bolivia tiene mecanismos para administrar la caída de ingresos petroleros y minerales.
La tendencia a la baja de los precios del petróleo y minerales provoca preocupación en los trabajadores y en el Gobierno. El presidente, Evo Morales, instruyó una evaluación técnica sobre las implicaciones de este tema considerando que la renta nacional se forma en los mercados internacionales de exportación. Morales sostuvo reuniones el pasado miércoles con representantes de organismos internacionales para identificar posibles soluciones ante el comportamiento del crudo y de los precios mineros en los mercados internacionales.
MINISTRO QUINTANA
Sin embargo, el ministro de la presidencia, Juan Ramón Quintana, minimizó esta semana el impacto de la baja cotización del petróleo y dijo que Bolivia tiene mecanismos para hacer frente esta situación aunque no dijo cómo.
Entretanto, analistas económicos afirman que Bolivia tiene recursos para enfrentar un “aterrizaje suave” y que a pesar de una merma de los recursos, el país tendrá un superávit comercial. El buen momento de los precios altos de las materias primas, permitió a Bolivia aumentar las reservas internacionales, por lo que hay margen para encarar la crisis, y el aterrizaje será suave, pronosticó, Alberto Bonadona, analista económico. Por su parte Armando Méndez fue más preciso y anticipó que los ingresos podrían bajar este 2015 alrededor de $us 1.300 millones.
VIENTOS EN CONTRA
Hector Malarín, flamante representante del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en Bolivia, dijo que América Latina tendrá vientos en contra, pero están preparados así como Bolivia para encarar los cambios económicos internacionales; deberán elaborar medidas para mantener el crecimiento, de acuerdo a su realidad, sostuvo en una de sus primeras declaraciones como nuevo representante del organismo multilateral en el país.
Bolivia mantiene indicadores significativos, así lo reconoció Malarín, al señalar que el país tiene condiciones necesarias para enfrentar los retos que se avecinan. “América Latina pasará tiempos difíciles, con vientos no a favor, sino en contra; los países latinoamericanos y Bolivia están bien preparados”, afirmó el representante del BID.
MANEJO PRUDENCIAL
A pesar de ello, sostiene que los países deben realizar un manejo macroeconómico adecuado, especialmente en aquellos sectores de mayor cuidado, con el objetivo de mantener las tasas de crecimiento.
“Hay que comenzar a pensar en ciertos tipos de mecanismos para mantener tasas de crecimiento del orden de 5%, porcentaje necesario para reducir la pobreza”, opinó Malarín.
A la pregunta de qué políticas deberían aplicar para encarar la época de “vacas flacas”, dijo que cada país toma la posición correspondiente, cada país definirá los ajustes que se tendrán que hacer, señaló.
Como se recordará, especialistas del BID participaron en la reunión que tuvieron el miércoles con el presidente Morales, en la que recibió sugerencias y planteamientos sobre cómo encarar los precios del petróleo. El representante del BID dijo que como banco los analistas dieron su opinión y la decisión es potestad del Gobierno.
ENDEUDAMIENTO
Por otra parte, Malarín sostuvo que para la presente gestión, el BID desembolsará en favor de Bolivia $us 335 millones y espera que el 2015 los recursos se incrementen a $us 450 millones. Anticipó subir esa cifra a $us 600 millones en 2016.
El incremento del financiamiento obedece a que Bolivia realizó un buen trabajo con las operaciones del banco, lo que permitió ampliar la cobertura del portafolio de crédito, añadió. Los recursos se destinarán principalmente a proyectos de infraestructura, agricultura y al sector social.
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