Día de los Reyes magos

Para comprobar una vez más la habilidad y competencia profesional de la cholita que me colabora en mi diario quehacer, le ordené que entrevistase a los Reyes magos que hoy visitarían al Niño Jesús que nació en el Belén de la Fe que existe en nuestros corazones. La orden fue recibida con agrado por mi colaboradora, quien inmediatamente salió en busca de los magos para obtener información acerca de la crisis del petróleo que hoy nos castiga a pesar del “blindaje” que anunciaron triunfantes algunos de nuestros gobernantes, que siendo solamente yatiris (brujos) sueñan con ser magos.

Ella salió de mi casa velozmente y regresó después de varias horas que empleó en su misión periodística, recibiéndola con alborozo, cual se merecía.

Jadeando aún y transpirando me contó haber logrado entrevistar a los tres Reyes magos, misión más fácil que entrevistar a nuestro Presidente Vitalicio y a su Estado Mayor de Compadres Socialistas.

¿Qué le dijeron los Reyes magos (que vienen desde Medio Oriente) acerca de los perjuicios que sufrirá nuestra economía? -pregunté a mi hábil reportera-, respondiendo Macacha: “Le cuento que fue Melchor, el rey negro, quien me dijo “los bolivianos estarán fregados con jota, pues nadie podrá arreglar ese entuerto y estarán condenados a vivir una larga etapa de las vacas flacas…”, lo cual nos consternó.

Finalmente se impuso el optimismo de la cholita nacida en Quillacollo, quien me relató que cuando ella buscaba a los Reyes magos se encontró con centenares o tal vez millares de “hermanos campesinos” que habían llegado a La Paz para ser testigos de la cuarta posesión presidencial de Evo Morales Aima, cuyos subalternos han preparado dos actos de posesión, uno en Tiwanaku con el estilo aymara y otro en la sede del Congreso boliviano que está en el Palacio Legislativo de La Paz, acontecimientos a los que no podemos faltar, según mi comadre cochabambina.

Aunque yo me resisto a concurrir con el argumento de que esa película ya la he visto varias veces, siendo muy posible escuchar los mismos discursos y los mismos ofrecimientos.

Mi reportera me anunció con anticipación que ella estará en primera fila para ser testigo de esas actuaciones, aunque yo no la acompañe, prometiendo contarme todos los actos con fidelidad e imparcialidad; yo le prometí escuchar las transmisiones radiales desde mi lecho nupcial.

De esa manera hemos llegado a un acuerdo para los actos conmemorativos de la primera ascensión al Poder del señor Evo Morales, quien se engolosinó con el Poder.

Sin embargo no se sorprendan mis lectores si soy obligado a concurrir a tales actos porque reconozco el enorme poder que ejerce sobre mí la atractiva cholita cochabambina, quien además posee mucha plata que me la presta de vez en cuando. Es que Dios dispone, el hombre propone, viene una cholita y todo lo descompone.