Lucila R., una víctima de robo agravado, se recupera de heridas generadas por un arma de fuego cuando una banda delictiva la atacó para sustraerle sus pertenencias. Como ella, más de 10 víctimas de la inseguridad ciudadana se recuperan en centros de salud de la urbe alteña sin el debido apoyo psicológico.
La responsable del Hospital del Norte, Tatiana Cruz, dio a conocer que si bien la afectada por disparo de arma de fuego se recupera paulatinamente, la misma aún registra secuelas de la herida (proceso de cicatrización).
“Esta semana ella será dada de alta, la paciente ha respondido muy bien a la intervención quirúrgica donde se logra sustraer un proyectil, estaba con respirador mecánico y poco a poco sus pulmones han logrado dejar la máquina”, detalló.
La paciente, internada varios días como consecuencia del grado de la herida que tenía en el cuerpo en la región del estómago, fue atendida también en terapia intensiva, de donde poco a poco logró recuperarse. Ante la complicación de los órganos internos, como consecuencia de la herida producida por proyectil por disparo de arma de fuego, la paciente tuvo que tener una atención de mayor seguimiento en su recuperación, explicó Cruz.
La terapia intensiva, más la transfusión de sangre fue otro de los procesos que duro más de una semana en la cual Lucila superó aceptablemente la afección, manteniéndose en condiciones favorables.
Como ella, más de nueve pacientes atendidas en diferentes centros de salud de esta urbe, son las víctimas de la delincuencia que genera las mayores pérdidas y desintegraciones familiares, las cuales no son atendidas por las autoridades municipales, policiales y menos por el propio gobierno. En muchos de los casos se trata del uso de arma de fuego calibre 22, 38 y nueve milímetros, los cuales son utilizados por varias organizaciones criminales dedicadas sobre todo al robo agravado en domicilios, tiendas y a quienes efectúan la venta o compra de motorizados a la venta en las ferias de la zona 16 de Julio y otras distritales, también a quienes logran obtener dinero de entidades bancarias.
TRAUMAS
Para el personal de diferentes centros de salud, las victimas de robo agravado con arma de fuego, como ocurrió en el caso del pasado 15 de mayo en la zona de bajo Milluni donde cuatro personas fueron baleadas, de las cuales una perdió la vida en el hecho delictivo, todas ellas pueden obtener una atención médica inmediata y recuperar de manera favorable. Los traumas psicológicos son las secuelas que muy pocas veces pueden buscar una solución u obtener alguna ayuda en ese ámbito, porque en su mayoría deben efectuar sus gastos por ellos mismos sin ayuda de ninguna instancia.
“Nosotros hemos pagado nuestros gastos en el hospital, nadie nos colabora, ni el Municipio que recibe dinero de la seguridad ciudadana y ahora nos quedamos con los traumas psicológicos, eso quién nos trata, quién paga”, exclamó el familiar de una de las víctimas quien prefiere mantenerse en reserva.
Un grupo de 23 víctimas de robo agravado con secuelas médicas y psicológicas demandan que el Municipio, la Gobernación y el Gobierno sean las instancias que paguen la recuperación de las víctimas de la delincuencia de la inseguridad ciudadana.
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