Pelea por el poder y “simbología ancestral”

Evo Morales Ayma, previo a sus tres mandatos presidenciales, impuso al país el posible escenario de la Civilización Tiwanaku, inaugurando en la famosa “Puerta del Sol” un nuevo “Pachacuti”, es decir, un nuevo amanecer que supone el fin de siglos de dependencia colonial.

Vestido a la usanza de los influyentes “orejones” de Tiwanaku, con el clásico gorro de cuatro puntas y enarbolando un bastón de mando entregado por las etnias, asumió en aquellas ocasiones, el liderazgo indígena del actual territorio boliviano y luego, cumpliendo las modernas leyes, fue legalmente posesionado por la Asamblea Plurinacional, como Primer Mandatario del Estado.

La puesta en escena de la simbología ancestral echó raíces en la militancia del Movimiento Al Socialismo, partido gobernante y también en disidentes del MAS que, a partir de la unción originaria de Evo Morales Ayma, utilizan ciertos atuendos en su vestimenta moderna; recurren a la cosmovisión indígena e imitan cuanto pueden, al escenario creado por el entorno político del presidente boliviano.

Pero, los seguidores de este formato, piensan que realmente recibir los buenos augurios, vestir como los ancestros y obtener el bastón de mando de las etnias, es el primer paso para avanzar en sus candidaturas a la presidencia de Bolivia.

Félix Patzi, de origen aymara, furibundo militante del MAS, hasta que rompió lanzas con el partido oficialista y la cúpula dirigente, dolido en cierta manera por dejar, obligado, el cargo de Ministro de Educación y otros puestos de mando en el gobierno de Evo Morales, se alió con la oposición y, gracias al voto castigo de la población de La Paz contra el oficialismo, ganó la gobernación de este departamento.

Como otros exmilitantes del MAS, por sus raíces indígenas, Félix Patzi cree ser “heredero de Evo Morales” y en base a esa suposición, aspira según sus seguidores y él mismo, a la presidencia del Estado Plurinacional de Bolivia.

En la población de Sullkawi, Patzi, en otro escenario que rememora, según su entorno, la lucha del líder indígena Túpac Katari, que sitió a la ciudad de la Paz, en 1781, durante el gobierno colonial español, asumió como gobernador del departamento de La Paz.

Pequeñas diferencias de tiempo y de espacio entre Tiwanaku y Ayo Ayo, lugar de nacimiento de Tupac Katari, pero ambas latitudes, nétamente kollas.

En síntesis, los escenarios precolombinos y ocupados por la Colonia española sirven de telón de fondo a quienes se dedican a la política y aspiran a la primera magistratura de Bolivia.

SEGUNDO TÚPAC KATARI

Veamos la noticia enfocada por ANF, que relata los pormenores sobre Patzi: “Sullcawi, 28 de mayo (ANF).-El candidato electo a la Gobernación de La Paz, Félix Patzi Paco, participa ayer jueves de un acto ritual en la localidad de Sullvawi, muy cerca de Ayo Ayo, la cuna del katarismo y fue proclamado allí por sus adherentes como “Segundo Tupaj Katari”.

En la ceremonia participan dirigentes de todas las comunidades aleñadas. Patzi ingresó primero a la que se supone fue la casa del caudillo indígena del siglo XVIII. Salió de allí acompañado por su madre y su esposa. Luego todos se dirigieron al sitio donde Julián Apaza (Tupaj Katari) se escondía de las tropas españolas a las que asedió dos veces en la ciudad de La Paz.

Allí, con cadenas en las manos, Patzi cambió de vestimenta. Con un gorro de lana blanco y negro (lluchu) y un pantalón negro, el futuro gobernador fue recibido por un coro de exclamaciones, entre ellas, “Patzi presidente”. El dirigente Víctor Marca le entregó el tradicional poncho. La esposa del Gobernador también cambió de vestimenta y luce ropa de color morado. Ambos recibieron como pareja los símbolos de mando como una honda, un pututu y un sombrero. También le fue entregado un bastón de mando y una bandera whipala. Patzi prometió cumplir con sus promesas electorales”.

Cabe preguntar a Félix Patzi, si, esta vez como “segundo Tupaj Katari”, sitiará a la ciudad que desde el 31 de mayo debe gobernar de acuerdo a las leyes constitucionales que imponen su propio mandato. No hay mucho que escoger. (Clovis Díaz de O. F.), (clovisdiazf@gmail.com).