Ejército de Bolivia concluyó misión de paz en Haití

El contingente de efectivos del Ejército que cumplía operaciones de paz en Haití concluyó su operación en la misión de paz en ese país y fueron despedidos con lágrimas por los habitantes de esa nación como muestra de aprecio al trabajo que cumplieron los 15 contingentes que fueron destinados.

Luego de nueve años de permanencia de 15 contingentes militares bolivianos en ese país, llegó a su término la presencia de efectivos del Ejército de Bolivia, motivo por el cual se desarrolló, el pasado miércoles 26 de mayo, un acto en la Base Tihuanacu”, situada en la capital haitiana de Puerto Príncipe.

A la ceremonia de cierre de misión asistieron la Representante Especial del Secretario General de las Naciones Unidas, Sandra Honore, los ministros de Defensa de Bolivia y Haití, el Segundo Comandante de la Fuerza Militar de la Minustah, jefes militares bolivianos, medios de comunicación e invitados especiales.

El Comandante General del Ejército, general de División José Luis Begazo Ampuero, expresó su complacencia con las tareas desarrolladas por los diferentes contingentes bolivianos que estuvieron en Haití.

“Nos sentimos orgullosos en lo más profundo de nuestro espíritu militar, porque hemos contribuido con nuestra presencia, nuestros recursos humanos, nuestros medios a cumplir la misión establecida por Naciones Unidas para estabilizar este país. La evaluación al final es altamente positiva”, afirmó.

A su turno el ministro de Defensa, Reymi Ferreira Justiniano, expresó su gratitud y reconocimiento a los hombres y mujeres componentes de la Compañía de Infantería Mecanizada “Bolivia XV”, último contingente militar boliviano en suelo haitiano.

“Tienen y sienten la satisfacción del deber cumplido”, remarcó la autoridad estatal, a tiempo de destacar el trabajo efectuado, la disciplina, la dedicación, la entrega y cumplimiento eficiente de las tareas encomendadas al personal militar boliviano.

La presencia militar boliviana en Haití, durante nueve años consecutivos, sumó 3.108 efectivos entre hombres y mujeres, personal que fue desplegado en 15 contingentes que se encargaron, a su turno, de devolver la paz social, estabilidad política y efectuar tareas de ayuda humanitaria.

El punto más destacado de la presencia militar boliviana en ese país se dio en enero de 2010 cuando Haití fue devastada por un terremoto que dejó luto y graves secuelas, de las que hasta la fecha aún no puede reponerse del todo.

En esa ocasión, personal militar y civil bolivianos, sin medir consecuencias y arriesgando su propia integridad física, proporcionaron ayuda a personal de contingentes de otros países y al propio pueblo haitiano.

Asimismo, la afectiva presencia en campañas de lucha contra el cólera y otras enfermedades endémicas de esa zona caribeña, fue determinante para que Haití supere varias epidemias que afectaron en gran medida a su población.

Durante su permanencia en Haití la capacidad profesional militar boliviana hizo que Naciones Unidas le asigne el nivel de “Unidad de Reserva” del Force Comander.

La presencia militar boliviana en Haití fue posible debido a que el Estado suscribió un Memorándum de Entendimiento con las Naciones Unidas para la estabilización de ese país el 15 de septiembre de 2006.

Durante su permanencia las diferentes compañías no tuvieron ni una baja ya sean éstas por entrenamiento o enfermedad.

El Ejército de Bolivia destaca la noble misión de contribuir a la paz en la República de Haití con excelentes resultados que se convierte en referente internacional para orgullo del Estado Plurinacional de Bolivia.

De esa manera, se cierra en la historia del Ejército, un capítulo más de la brillante participación de sus efectivos, que quedará no sólo en la memoria de los bolivianos, sino de todos los países que valoraron el loable trabajo de los cascos azules bolivianos en misiones de paz.