Matadero municipal incrementa sus ventas

El faenado y venta de carne del altiplano se incrementaron en más de 30% en el matadero municipal de la urbe alteña, según informó Mauricio Condori, uno de los comercializadores.

Por su parte, carniceros denunciaron que reciben amenazas de propietarios de frigoríficos quienes les exigen suspender la venta de carne.

Desde que la entidad de Servicio de Impuestos Nacionales (SIN) realizó operativos en el país para controlar la emisión de factura y constató que algunos frigoríficos y distribuidores mayoristas de carne no contaban con NIT, es decir, no estaban registrados en el padrón de contribuyentes, se iniciaron protestas para evitar el cierre de estos negocios.

Ante esto, se anunció que el sector de los frigoríficos y comercializadores mayoristas en carne determinará la suspensión de este servicio, en la ciudad de El Alto ya que las comerciantes minoristas de los puestos de zonas, ofrecen desde el fin de semana sólo carne de ganado del altiplano y carne de pollo.

Para los comerciantes minoristas la determinación si bien perjudica a su sector porque no presenta una variedad de carne en sus puestos destinados a las amas de casa, en la actualidad la población acostumbrada a consumir este producto sólo estaría adquiriendo ganado del altiplano.

De acuerdo con el cálculo del fisco, cada vendedor genera Bs 60.000 al día, lo que ascendería a Bs 1.800.000 en ventas mensuales. Según Erick Ariñez, presidente de la entidad recaudadora, se estarían evadiendo por persona y mes Bs 100.000 por el Impuesto al Valor Agregado (IVA), Bs 50.000 por el Impuesto a las Transacciones (IT) y Bs 1.600.000 por el Impuesto a las Utilidades (IU). Dichos montos no son de conocimiento de los comercializadores de carne de res, quienes aseguran que temen por las advertencias de los propietarios de frigoríficos, quienes señalaron que una vez se arregle el problema no distribuirán la carne a las comerciantes que no paralizaron las ventas, explicó Filomena Claure vendedora del mercado de Villa Adela.

Pero el sector carnicero sostiene que manejan entre 900 y 1.800 bolivianos diarios y que ellos solo son intermediarios de los grandes ganaderos de Santa Cruz y Beni.

Según un comunicado emitido por el SIN, Ariñez dijo que “no es objetivo de la Administración Tributaria controlar a las caseritas que venden carne en los barrios, ni a aquellas que venden carne en los mercados, o a aquellos lugares donde se vende carne de res o de pollo al detalle, considerando que cumplen sus obligaciones tributarias en el Régimen Tributario Simplificado (RTS) y no tienen la obligación de emitir factura”.

Desde el 8 del presente mes los comercializadores determinaron mantener un paro indefinido en la venta de carne de res, aspecto que en esta urbe sólo influyo para que las carnicerías vendan sólo la carne del altiplano, demanda que exige un mayor faeneo en un 30%, destinado también a la ciudad de La Paz, con el mismo precio que las pasadas semanas.