Cocarico es nuevo ministro de Desarrollo Rural y Tierras

El exgobernador de La Paz, César Cocarico, fue posesionado ayer como nuevo ministro de Desarrollo Rural y Tierras, en reemplazo de Nemesia Achacollo, quien renunció intempestivamente en horas de la mañana por irregularidades en el manejo del anterior Fondo Indígena.

El presidente Evo Morales posesionó ayer por la noche al exgobernador de La Paz, como nuevo ministro. Cocarico juramentó al cargo en una ceremonia que se realizó en Palacio de Gobierno, con la presencia del vicepresidente Álvaro García Linera y ministros de Estado.

“Presidente Evo el hecho de que me haya convocado para colaborarle en calidad de ministro para mí es un honor”, remarcó Cocarico después de juramentar frente al Jefe de Estado.

En su discurso se comprometió a dar el mayor esfuerzo para asumir esa cartera de Estado y dar respuesta al postulado de soberanía alimentaria que requiere el país.

En la ocasión también agradeció la confianza depositada en él por el Jefe de Estado. Su discurso de agradecimiento fue pronunciado en tres idiomas, español, aymara y quechua.

  “Manifestar que trataré de dar el máximo de mis esfuerzos para que este postulado, en este proceso de cambio que vivimos, pueda ser una realidad para beneficio de los pueblos en base al vivir bien”, puntualizó.

En tanto, el Primer Mandatario señaló a la nueva autoridad las tareas que debe impulsar desde su nueva cartera de Estado.

 Cocarico es profesor de educación física, abogado y exconstituyente por el MAS. Vive en la ciudad de El Alto. Nació en Escoma, provincia Camacho del departamento de La Paz el 1 de julio de 1969. Realizó sus estudios primarios y secundarios en el Colegio Nacional Mixto Escoma, luego estudió en el Instituto Normal Superior de Educación Física (Insef) y por último Derecho en la UMSA.

Fue gobernador del departamento entre 2010 y 2015 y no fue candidato a la reelección.

Achacollo renunció ayer a su puesto en el gabinete tras cinco años de haber encabezado el área. Juró al cargo en enero de 2010.

La lectura de su carta de dimisión se produjo en momentos en que el Fondo Indígena, dependiente de su cartera, ha sido sometido a una intervención tras lo cual se han descubierto decenas de proyectos “fantasmas” y casos de malversación de fondos a cargo de numerosos dirigentes sindicales e indígenas.