El hombre sin miedo

En una época de aventureros que no sentían demasiado aprecio por su vida, se lo debe juzgar por sus deseos velocistas siempre crecientes; (Sebastián Vettel) es un autentico titán, emblema de auto unión y quizás el piloto que más preocupa a los poderosos Mercedes de la presente gestión. Lo que llegaba como un mandato irrenunciable desde las esferas políticas era igualmente aplicado al automovilismo deportivo, así es Sebastián Vettel.

El prestigio de la marca alemana, cargada de tecnología inusual para esta época, también conllevaba esa evaluación extra de responsabilidad para quien se atrevería a desafiar los límites. Y si bien la portentosa Mercedes solidificaba un prestigio único y pensó que sería por bastante tiempo.Sebastián Vettel, un hombre que más allá de sus cualidades como conductor desenfrenado, pero seguro y aplicado mecánico nunca supo renunciar a su desafio por una cuestión sencilla y a la vez genéticamente inexplicable, porque no conocía el miedo. Vettel nunca dudó, jamás temió, no entraba en su mente que, como piloto de competición es capaz de llevar a su “bolido” rojo al extremo, pero confiando en que la gente de Ferrari tiene la experiencia de administrar una carrera de Fórmula Uno. Ganó Vettel con mayor holgura, el alemán alcanzaba su tercera victoria del año y consolidaba su cuadragésimo segundo triunfo, aunque con presiones de sus escoltas. Vettel salió a correr y ratificar lo hecho todo el fin de semana, para eso se debe tener fe de que la virtud puede superar la ventaja natural, aun así los esfuerzos increíbles ya sea por parte del equipo o del piloto para subsanar una deficiencia que al final dan resultados.

Al final, sin embargo, no es favorito porque tiene menos probabilidades de alcanzar el título mundial de la temporada. La victoria del piloto alemán no removerá esos sentimientos, porque está ahí el hombre que aprovechó al máximo lo notable mejora en el rendimiento de su Ferrari.