Bolivia gestiona repatriación de Chachapuma

El Chachapuma, pieza arqueológica de la cultura tiwanakota, será otra de las piezas que retornaría a Bolivia después de muchos años, luego de las gestiones que realiza el Ministerio de Culturas y Turismo.

Marko Machicao, ministro de Culturas y Turismo, anunció ayer que esta Cartera de Estado inició las gestiones correspondientes, a través de la vía diplomática, para la recuperación de la escultura arqueológica, como es el Chachapuma (hombre-puma), perteneciente a la cultura de Tiwanaku, actualmente se encuentra en el museo Quai Branly de Paris- Francia.

“Los trámites (de recuperación) son distintos, lo que hemos buscado como ministerio de culturas es a través de la diplomacia y diálogo, no hemos buscado entrar en litigios, que probablemente son soluciones de largo plazo”, dijo.

En el caso de Francia, fue a través del contacto directo con los repositorios, los museos y embajadas, por lo que las gestiones y negociaciones están muy avanzadas, esperamos darles sorpresas muy pronto en términos de recuperación patrimonial”, manifestó la autoridad.

Machicao mencionó que existen alrededor de 50 mil obras bolivianas dispersas a lo largo del mundo.Las regiones donde se encuentran son Norte América (Estados Unidos) y Europa (Francia, Inglaterra y Suiza).

La autoridad se mostró cauteloso al no mencionar cuántos bienes patrimoniales podrían ser recuperados, porque ello podría alterar un poco las negociaciones con los países.

“No quisiera adelantarme a otras negociaciones con otros países como Argentina o Estados Unidos, donde tenemos piezas arqueológicas importantes que fueron sustraídas en algún momento de la historia del país, no necesariamente de manera legal”, aseveró Machicao.

Así también señaló que en la legislación internacional se menciona: “Si alguien se sustrae un bien patrimonial, puede ser sujeto a un proceso, sin embargo, el que lo compra no porque no tiene ninguna responsabilidad, porque ha entrado a un circulo comercial”.

En tal sentido, Bolivia en la reunión general sostenida hace cuatro meses en la Unesco, ha propuesto se sancione a los que compren bienes patrimoniales, dado que son cómplices de esta comercialización ilícita. “Esperamos que esto en la próxima reunión general se pueda ratificar”, acotó.