“La coca incrementa el sexo”

En nuestro país que es exacerbadamente presidencialista, la figura de su Canciller suele pasar desapercibida para gran parte de la ciudadanía, aunque no sucede lo mismo para algunos periodistas perspicaces e inteligentes, como la que trabaja a mis órdenes: Macacha, una cholita cochabambina que se ha ganado el corazón de muchísimos lectores de este diario.

Pues bien, Macacha nunca perdió de vista la interesante figura de nuestro ministro de Relaciones Exteriores, señor David Choquehuanca, quien ocupa tan alto cargo desde el primer día que Evo Morales ocupó la Presidencia del Estado Plurinacional, Multilingüe y Folclórico de Bolivia.

A partir de entonces el señor Choquehuanca figura en la Agenda Especial de Macacha, una de las pocas ciudadanas que se permite la confianza de llamar a Choquehuanca “Choky”, cual si fuera su íntima amiga.

Esta mañana, Macacha me sorprendió con la noticia de que “El canciller Choquehuanca había hecho saber al país que masticar la hoja sagrada incrementa la sexualidad de quienes acullican la hoja milenaria”.

Cuando la bambina cochabambina me hizo conocer la revelación del insigne Choquehuanca no me inmuté, pues soy un viejo lobo de mar (y también lobo de bar), que me vengan a decir ahora que la cocaína incrementa la sexualidad entre quienes la consumen, pues eso lo sabemos todos, inquietándome mucho más la difusión de este tema a cargo de un personaje como el señor Choquehuanca.

Como todavía tengo buena memoria, recordé que hace algunos años fue el mismo personaje quien asombró al mundo occidental con su revelación de que las piedras tienen sexo y que él se daba a la tarea de separarlas (seguramente en su Despacho del Ministerio de Relaciones Exteriores) en piedras del sexo femenino y piedras del sexo masculino, ímproba labor que la ciencia mundial aún no ha reconocido suficientemente al canciller Choquehuanca.

La presencia extraordinaria de este sabio boliviano tan conocedor de la sexualidad en los hombres y en las piedras me llevó a decir a mi corresponsal en el Palacio Real de la plaza Murillo la necesidad de promover mundialmente la mayor difusión de las ideas del señor Choquehuanca, manifestándome la cochabambina nacida en Quillacollo la urgencia de contactarnos con nuestros amigos yatiris, brujos andinos Calimán, Mandrake y Titirico, íntimos amigos y colaboradores del canciller Choquehuanca para difundir más aún las teorías de Choky por nuestro mundo exterior cada día más incrédulo y agnóstico.