El Tigre atizó su chance, Sport Boys ganó y se disparó hacia el título

El Tigre atizó su mejor carta para mantenerse en pie para dar pelea por el título del Apertura. Sport Boys le dio dos bofetadas en un partido clave (1-2), y retomó –la visita- el liderato a tres fechas de la conclusión del certamen, y virtualmente pusieron el champagne en la mesa, porque sólo dependen de sí mismos y sin salir de Santa Cruz.

La victoria del ‘Toro warneño’, se llevó también en gran medida las ilusiones de Bolívar, puesto que sus 37 puntos, no le abastecerían para frenar la gran arremetida de los cruceños que ahora miran de arriba con 39 unidades.

Basta repasar lo que tiene a su consideración Sport Boys en lo que resta del certamen doméstico, y el sprint que puso en escena anoche, se puede convenir en el concepto de que con cuasi accesibles los adversarios que tendrá enfrente en el tramo que le resta encarar. El próximo lunes recibirá en su patio a Real Potosí, el miércoles 16 se las verá con Blooming en el ‘Tahuichi’ Aguilera y cerrará su campaña ante su público recibiendo a Ciclón.

Por estos antecedentes, en gran medida hace ver que el otro grande de La Paz, Bolívar, con la caída de su clásico adversario anoche, prácticamente se abrían cerrado los grifos del festejo final.

Sport Boys, en ocho minutos deshizo a su oponente (8’ y 16’ ST), con dos incursiones letales de Helmut Gutiérrez, quién se hizo de coraje para poner su sello en jugadas de contragolpe, dejando a contrapié a la endeble defensa del gualdinegro.

LOS GOLES

Cuando las opciones de gol parecían lejanas, apareció la acción personal de Alejandro Chumacero. Un soberbio derechazo desde 20 m venció la custodia del lungo arquero Lampe cuando se jugaba el minuto 40 del primer tiempo. Hubo complicidad de la zaga visitantes que descuidó la marca.

El empate fue producto de una buena pared entre Medina y Gutiérrez, éste último se zafó de su marca y se comió mucho metros hasta el mano a mano con el meta Vaca y su sutil disparo bajo junto al palo derecho provocó la transitoria igualdad (8’ ST).

Para darle lustra a una gran faena, nuevamente Gutiérrez, en una jugada calcada, recibe un pase quirúrgico para su viaje implacable, y nuevamente anula con seguridad y tiro seco y bajo para transformar en victoria el lance (16’).

EL PARTIDO

Para el resultado victorioso del warneño, tuvo mucho que ver la disciplina táctica y su buen trato de balón, frente a un adversario inseguro y nervioso que se fundió en errores defensivos, y terminó asfixiado porque no tuvo argumentos suficientes para volcar el curso de un lance olvidable.

En la primer etapa, la faena de Gomes, Gutiérrez y Medina, en gran medida le dieron estatura de juego ante un adversario que le costaba encontrar coherencia y tranquilidad para su andar en el rectángulo del estadio Siles. Las oportunidades de gol en la primera etapa fueron casi nulas y en la más clara que tuvo la visita, Medina con buen disparo exige una buena acción del meta Vaca (37’).

El buen trato de balón, las triangulaciones con entregas bien hechas, a Sport Boys le daban mejor perspectiva, y opuesta mente el Tigre se desordenaba y sus chances eran casi nulas por el buen trabajo de la defensa visitante.

Si hubo una diferencia entre los ocasionales oponentes, fue el trato al balón, porque las lineas compactas que mostró el werneño, contrastaban con el nerviosismo y descompesada propuesta del Tigre, que tuvo muchasa licencias defensivas, y adoleció de ataque, porque jugadores claves como Escobar y Ramallo fue atados y su mediocampo careció de ideas.

A la postre, el desenlace del pleito, traduce lo acontecido en el campo de juego, y ahora resta saber si Sport Warnes llega a buen puerto.

Genaro Orellana