Evitar irracionalidad ante desabastecimiento de agua

La ciudad de La Paz no tiene la capacidad de abastecer a su población de agua y esta comienza a actuar de forma “irracional”, pese a estar rodeada de cuencas acuáticas, que con el desarrollo urbano de los últimos años se convirtieron en corrientes subterráneas.

Un análisis que realizó el especialista en neurociencia conceptual, Fernando Camacho, explica que el desabastecimiento de agua refleja en la sociedad el pánico.

“Es diferente percibir el miedo de forma individual, que hacerlo de forma grupal, debido a que en esta forma se asientan más los miedos, y la gente tiene una tendencia a creer en los rumores o buscar información verídica”, explicó.

DÉFICIT

Consideró que el déficit del agua potable es una problemática a nivel mundial, que se constituye en un aspecto de preocupación global, sin embargo, la sociedad ahonda más en sus miedos y la gente comienza a actuar de una manera “irracional”, y se generan pensamientos y conductas que no van de acuerdo a lo que nosotros somos, “seres racionales”.

El problema es particularmente complejo, pero natural a su vez, por la forma de actuar, debido a que el primer instinto del ser humano es la supervivencia, es ahí donde nos volvemos egoístas. “Actuamos para sobrevivir, no nos interesa el bienestar común, sino el bienestar personal, en este caso el agua”.

EVITAR MORBO

Recomendó evitar el morbo al momento de dar una información referente a esta problemática, que aqueja a la población boliviana en cinco regiones del país. “No debemos alimentar el morbo en lo negativo, de lo mal que está el mundo, nuestra situación; de querer ver lo trágico que ocurre”.

Señaló que los ciudadanos debemos ser proactivos y resguardarnos previa información. “Si nos guiamos por rumores esto generará distorsión y pánico social”.

En cuanto a los medios de comunicación, reflexionó que se debe brindar información coherente y real evitando emitir juicios de valor al momento de brindar la información. Además de otorgar mensajes preventivos.

“Es mejor prevenir que curar dando mensajes reales y racionales, en este momento de miedo social lo que digan los medios conllevará a las actitudes de los ciudadanos”, concluyó.