Descomposición de la basura obliga a declarar alerta sanitaria

La contaminación por basura implica daños al suelo y aire, por la acumulación, y se convierte en un foco de infección, que podría enfermar a las personas en caso de que esta no sea atendida de forma oportuna. La Sociedad de Salud Pública y el Colegio Médico de La Paz, luego de una evaluación, declararán alerta sanitaria.

En entrevista con EL DIARIO, el presidente del Colegio Médico departamental La Paz, Luis Larrea, informó ayer que hoy la Sociedad de Salud Pública y el Colegio Médico de La Paz emitirán un comunicado, declarando alerta sanitaria tras el racionamiento de agua y el no recojo de basura, que se prolífera en la ciudad.

Larrea informó que luego de una evaluación, hoy se emitirá el comunicado debido a que se registraron 50 casos de infecciones gastrointestinales por consumo de agua y alimentos en restaurantes. “No podemos guardar la basura hasta el viernes, es la peor medida”, dijo.

BASURA, FOCO DE INFECCIÓN

Consultado sobre el tema, el presidente del Colegio Médico de Bolivia, doctor Aníbal Cruz, dijo a EL DIARIO que la exposición de la basura y la carencia de agua podrían desencadenar enfermedades gastrointestinales, dermatológicas y respiratorias.

La cantidad y el tipo de basura depende de cada región o país, pero el consumismo y el número de habitantes están relacionados con la cantidad de basura que se genera, por lo que la contaminación se convierte en un problema mayor, más aún cuando el calor actualmente es mayor a los 22 grados.

Complementó que la basura que acaba en el suelo o por la humedad tiene la predisposición a descomponerse y emitir gases como el metano; esto significa que la basura tiene la capacidad de contaminar los tres entornos básicos de la vida en la Tierra (aire, agua y suelo).

Sostuvo que la basura amontonada atrae insectos y otros animales que destrozan las bolsas y se expanden a través del viento, provocando la contaminación. “Lo más peligroso son los desechos de los baños, los gérmenes de las heces fecales, que se expanden con el viento al aire, y se convierte en un foco de infección, que enferma a las personas y esto es un alto peligro sanitario”.

Señaló que las enfermedades gastrointestinales (parasitosis y Escherichia coli), respiratorias (alergias) y dermatológicas (hongos) podrán desencadenar un alto riego en los ciudadanos.