Los enfrentamientos entre narcotraficantes y policías en las favelas de Ciudad de Dios y La Maré, dos de los complejos más populosos de Río de Janeiro, han dejado en apenas tres días cerca de 15 muertos, cuatro de ellos agentes.
Los operativos policiales, además, obligaron al cierre de comercios y dejaron sin clases a más de 7.000 niños en varias comunidades de la periferia de la ciudad.
Las últimas víctimas, cuatro presuntos traficantes, murieron ayer en una operación de la policía militar y las tropas de choque en el complejo de La Maré, en la zona norte de Río.
Dos de ellos fueron abatidos por los agentes y los otros dos resultaron gravemente heridos durante los tiroteos y fallecieron en un hospital, según la versión oficial.