Debbie Reynolds, por siempre la voz de Cantando bajo la lluvia, ha fallecido ayer a los 84 años, tan solo un día después de morir su hija, la también actriz y estrella de, La guerra de las galaxias, Carrie Fisher. Todd Fisher, su hijo y hermano de Carrie, confirmó la noticia. “Se encuentra con Carrie”, indicó en un comunicado el también actor y director.
La candidata al Oscar en 1965 por The Unsinkable Molly Brown fue hospitalizada en el centro médico Cedars-Sinai de Los Angeles, tras mostrar síntomas de una posible embolia. La actriz se encontraba en casa de su hijo organizando el funeral de Fisher cuando se sintió mal y sus familiares llamaron a los servicios de urgencia. Tras su ingreso a la 1:00 hora local del miércoles Fisher indicó que su madre “no se encontraba bien”. Su muerte fue confirmada horas más tarde.
Como a todos sus seguidores y amigos de Carrie Fisher, a Reynolds la muerte de su hija la pilló por sorpresa. La más conocida como la princesa Leia, papel que le dio la fama como protagonista de La guerra de las galaxias, sufrió un paro cardiaco el pasado viernes mientras volaba de Londres a Los Angeles.