Jubilación de trabajadores en riesgo

Los recursos a cargo de las Administradoras de Fondos de Pensiones están destinados al sustento de los trabajadores, por lo que son considerados intocables, por ser el seguro de vida de ciudadanos de la tercera edad. Por ello alarma a la ciudadanía que se haya decidido, entre gobierno y empresarios cruceños del agro, utilizar esos dineros para dar préstamos al sector agrícola del oriente. Se quiere involucrar también a medianos y pequeños productores, con grandes desventajas para el capital a ser invertido. Estos préstamos serían por 10 años y con un interés del 7%. Según los productores cruceños, esta ayuda económica serviría para comprar maquinaria agrícola y aumentar las áreas de cultivo.

El gobierno usaría 5% de los recursos de las AFPs porque, al parecer, los medios oficiales no tienen dinero para financiar proyectos agrícolas y a los productores cruceños no les importa el origen de los fondos, porque el gobierno es el que manda y nadie tiene que discutir. Para la ciudadanía el uso de esos recursos económicos es un abuso de poder y desprecio por los demás. Se demuestra de esta forma que no les interesa la suerte de los trabajadores en el ocaso de sus días para tener una renta fija. Los aportes individuales a las AFPs son intocables y disponer de ellos causa incertidumbre.

Es necesario aclarar que por falta de calificación de riesgos no es seguro el cumplimiento de pagos por esos préstamos, porque puede haber variaciones climatológicas, falta de lluvias o inundaciones imprevistas, lo que originaría problemas en las siembras agrícolas y los agricultores cruceños quedarían en una situación muy difícil.

La COB y los trabajadores han pedido que no se toque los dineros de las AFPs, porque implican la seguridad de los trabajadores que se sacrifican para tener una renta garantizada. Desde ya se advierte tenaz resistencia, que se podría traducir en paros y bloqueos en todo el país, lo que ocasionaría conflictos sociales que en estos momentos son perjudiciales para el progreso de Bolivia.

El gobierno con prudencia debe buscar otra fuente de financiamiento a fin de tranquilizar al país. Al respecto, si no hubiera habido corrupción en el Fondo Indígena, se tendría esos dineros, cuya función era la reactivación de la agricultura. Pero por un manejo corrupto y pese a una inyección económica al ente indígena, ha quedado completamente inutilizad o para un funcionamiento efectivo.

El fondo de inversión agrícola que planifica el gobierno tendría que ser solo para productores medianos, indicando que no solo pagarán la deuda, sino también intereses. Intentar dar préstamos a agricultores pequeños sería correr una aventura, ya que ellos no tienen solvencia para pagar deudas y mucho menos para dar garantías, porque es darles dinero a manos llenas sin posibilidad de recobrarlo. Sería como darles un regalo, por ello creemos que por detrás hay intereses políticos. Por estas consideraciones la resistencia de los trabajadores es unánime para que no se toque los dineros que manejan las AFPs.

El autor es Profesor Emérito y ex-autoridad universitaria de la UMSA.