¿Ahora gobiernan los indígenas?

Evo Morales, en Orinoca, dijo: “ahora, los indios gobiernan Bolivia”. Esta declaración de carácter racista, confirmada por J. Tirado C., reafirma un menosprecio por el indio, ni qué decir del obrero. Como sea, ha debido causar más que una sonrisa. Por si acaso, políticamente, hay “indios” indianistas, indigenistas, ecologistas y hasta esotéricos (similar a Huanacuni), que juntos no llegan al 27% de los bolivianos. Lo indio, parafraseando a Silvia Rivera, es una episteme (conocimiento) usurpado por oportunistas, mitómanos y ególatras. Neo (cholos-mestizos) y para-indígenas (criollos) que económicamente son clase, pero –ahora- sustituidos con el “hermanamiento” de ricos y pobres utilizando lo indígena.

Hay un despojo epistemológico de lo indio, es decir, un epistemicidio (destrucción de lo indio) preocupados –más- por el TENER que por el SER, desprotegiendo la vida. Desde 2003, el racismo de los puristas (indianistas) mestizos y criollos colonizados en concomitancia con algún lumpen (proletarios miserables) improvisaron contradicciones (qhara-t’ara), devaluaron el rote (léase, dialéctica) de la episteme, por ejemplo, cambian el saco por el poncho o viceversa, seguros de que lo indio tiene que ver -más- con el color de piel y la vestimenta. Y es que el Poder requería de apariencia “india”. Ésta que se “envilece” con la penetración del capital y la inversión estatal china y rusa, depredadores del medio ambiente, de la pachamama, con mega obras, descuidando necesidades urgentes: salud, educación, trabajo, vivienda, justicia etc., para el pueblo.

El Poder –colonial- devalúa al poder Judicial, para encarcelar al disidente, sumándose “grupúsculos”, que las élites (mestizo-criollas) llaman “movimientos sociales”: sujetos disfrazados de “indios” que son capturados: “te doy esto si estás conmigo”. En fin… este supuesto “gobierno indio” resultó lleno de tránsfugas (derechistas) neoliberales (sin indios) que consideran a las autonomías indígenas una paja. Un gobierno indio no recurre a disfraces y rituales falsos para los turistas. Ponchos, ritos falsos y color de piel no son “lo indio”. La episteme, más que humanos, montañas, ríos, animales son entidades con las que se dialoga para reproducir la vida (se planta un árbol para talar otro) complementando el trabajo humano y el intelectual como parte de la vida.

Entonces ¿cuál gobierno indio? ¿Acaso algún indio es autoridad? ¿Acaso un indio roba a otro indio?, pregunta Ojopi con el Fondioc. ¿Acaso se les consulta como manda la CPE? ¿Acaso los indianistas no se apoyan en leyes capitalistas para liquidar lo indio? ¿Acaso hay soberanía alimentaria? ¿Acaso no es brutal el desbosque en la Amazonia? ¿Acaso el líder -que no sabe mucho- no utiliza chivos expiatorios (A. Moreira)? Mucha improvisación. Pero el fracaso es de todos y todas.

Desde el principio, fuimos “tibios” frente al engaño, al abuso. Ahora, estamos permitiendo la “alianza” entre el Poder oficial y la oligarquía oriental para el despojo del 5% de las AFPS (recordemos al Banco Agrícola), hemos permitido el Dakar, el Tipnis, la crisis del agua, etc., que el indio (auténtico) no hubiera permitido. Por ello, para ser “gobierno indio” deben reaprender la episteme y no -solo-“jugar” con ritos en la televisión. Eximir posiciones genuflexas a “X” dirigentes; que se “aprovechan” de los indianistas. Sobre todo, rescatar y cumplir el ama sua, llulla y qhella “apolillada” -ahora- en gavetas de los que fungen de indios.

El autor es Director de Centro de Investigación, Servicios Educativos y de Comunicación (CISEC).