Carne de burro y caballo no es para consumo humano

La responsable de inocuidad alimentaria del Municipio de El Alto, Roscio Pérez, dio a conocer que a diferencia de otros países, en el territorio nacional, los caballos y burros, no son aptos para el consumo humano, al ser utilizados como animales de carga y no de engorde.

“Al haber sido utilizados, como animales de carga, tanto a los caballos, burros, su estructura muscular es más trabajada. Por ejemplo en el caso de los caballos si son faenados, llegan a ser muertos por algún tipo de enfermedad, por lo que puede llegar a afectar a la población humana”, explicó.

Pérez remarcó que en el territorio nacional, las únicas carnes permitidas para el consumo humano, son las aves, res, llama, cerdo, que son criadas en procesos de engorde y llegan a ser faenados en mataderos legalmente establecidos y autorizados por Senasag.

CARNE SIN CONTROL

Mientras que el responsable de veterinaria Josimar Aliaga explicó que existen riesgos en la salud de las personas, el consumo de carnes de animales no aptos, por el inadecuado manejo de este tipo de animales de carga, quienes tampoco tienen un tratamiento veterinario, que permita garantizar que no se encuentren afectados por alguna enfermedad riesgosa.

“Estos animales, que incluso son llevados a mataderos clandestinos, tanto en la ciudad de La Paz, pero sobre todo en El Alto, pueden tener diferentes enfermedades, como en la carne de burro puede tener la encefalitis equina, rabia, brucelosis, tuberculosis, porque los animales de carga no fueron tratados adecuadamente por veterinarios especializados”, explicó.

DESTINADA A EMBUTIDOS

Las carnes de animales de carga, no son tratadas por un veterinario y enfrentan un proceso traumático de muerte en un matadero clandestino, donde no existe ningún cuidado en la contaminación de la carne del animal, “la carne está en el piso, tapada con calaminas, con yute y esta carne está destinada a la fabricación de embutidos, es por eso que existe un proceso de cultivo de bacterias como la Escherichia coli y la Salmonelosis, siendo las dos enfermedades infecciosas, que producen no solo intoxicación alimentaria, sino dañan los intestinos”, detalló.

El veterinario recomienda que una vez que llegue el animal al matadero municipal, debería tener 24 horas de reposo, con la finalidad de ser analizado por un veterinario, quien determine si el animal está o no afectado por alguna enfermedad, que cumplen con las vacunas correspondientes, como certifica Senasag, con la finalidad de evitar riesgo a momento de ser destinado al consumo humano. De acuerdo a normativa en cada matadero debe existir un médico veterinario que analice esta situación, lo que no ocurre con los mataderos clandestinos.