Ministro reconoció que afecta crisis brasileña

El ministro de Economía, Mario Guillén, afirmó ayer que el crecimiento económico boliviano pierde dinamismo, debido a la crisis económica brasileña que se tradujo en la menor demanda de gas, según reporte de Erbol.

De esta forma, el ministro Guillén desestimó la teoría de su antecesor, Luis Arce, quien en el desempeño de su cargo aseguraba al país que la fortaleza de la economía boliviana era el consumo interno por lo que consideraba que estaba blindada y que el mercado externo no era determinante para impulsar el crecimiento.

PERSPECTIVAS

El ministro expresó que para el segundo semestre la demanda de gas está en ascenso. Estimó que con ese repunte se recuperará el crecimiento económico registrado al primer trimestre. En ese entendido, indicó que el Gobierno mantiene su objetivo de concluir en 2017 con una tasa de 4,7% de crecimiento.

ACTIVIDAD ECONÓMICA

Guillén explicó, según datos del INE, que al primer trimestre de este año el crecimiento económico fue de 3,3%. Esa cifra está por debajo del 5,4% registrado en 2016 o del 4,8% que es el promedio de crecimiento registrado en los primeros trimestres desde 2016.    

EXPORTACIONES

Guillén explicó que la cifra de crecimiento del primer trimestre de 2017 se debe a la disminución de la demanda externa, sobre todo por la baja en la exportación de gas a Brasil.  “Principalmente lo que nos está afectando es la crisis de Brasil, que producto de una crisis económica que como ustedes saben que tiene Brasil, ellos nos estarían comprando menores volúmenes de gas. Eso es lo que nos jala hacia abajo el crecimiento”, dijo.

MENOR CRECIMIENTO

Según los datos presentados por la autoridad, en el primer trimestre hubo un decrecimiento de 14% en el sector de hidrocarburos. 

Por el otro lado, Guillén destacó que el crecimiento económico boliviano es apuntalado por la demanda interna, que al primer trimestre tuvo un incremento de 7,2%. Negó que exista una desaceleración en la economía boliviana. 

Destacó que en dicho periodo el sector agropecuario creció al 8,6%, la construcción 7,2%, alimentos 5,6%, transporte y comunicaciones 5,4%, comercio 5,2%, administración pública 4,8%, entre otros.