La comunicación nos une o nos separa

El tipo de comunicación que practicamos con los demás determina un grado de salud o un grado de enfermedad.

Una amistad sufría por el trato despectivo de su pareja y por su infidelidad también se veía con muchas dolencias. Cuando vino para que la ayudase, creyó que contándome su problema y lamentándose yo podía ayudarle. Le costó admitir que si seguía hablando y diciendo las mismas cosas no mejoraría ni su salud ni su problema; lo que había que

hacer era interrumpir la pauta, la rutina de su “mal pensar” que le provocaba un mal sentir constante. Le hice escuchar un cd terapéutico de relajación profunda que desconectaba su atención de su problema que ya no le dejaba ni dormir ni estar en paz y menos, estar en un estado positivo y de seguridad.

Después de cuarenta minutos de audición con auriculares y con los ojos cubiertos, despertó sonriente, al fin le había dado a su cuerpo la oportunidad de reponerse y a su mente la posibilidad de crear disociación o separación del problema.

Nuestra mente automática tiene esa cualidad, es demasiado persistente en lo malo y un poco floja en lo bueno y los ejemplos de esta verdad los podemos ver a diario.

Mi amiga había iniciado una serie de aprendizajes para salir del círculo vicioso de su autocomunicación “enfermante” para ingresar en un hábito positivo de comunicarse consigo misma de manera compasiva, de manera deliberadamente positiva y constructiva y logró salir del fango de la negatividad y ponerle soluciones reales a su vida, la serie de audiciones

en estado de concentración produjo su resultado deseado y retomó el mando de su hogar, de su negocio y de su mente. Ahora no permite que nadie la coloque en estado negativo y todo sigue mejorando en su vida al son de sus decisiones y de sus actos de aprendizaje deliberado.

Ejercicio de autocomunicación sana: Escriba hasta memorizar con agrado la siguiente afirmación: “Pienso antes de hablar y hablo sólo de lo bueno y me abstengo de hablar de miserias y de minucias en cada momento de mi vida”.

*Pensamiento para escribir hasta lograr lo deseado: Para relajar la mente y el espíritu: “Me mantengo en mi burbuja de positividad”.