Costosos encantos del Ingenio “Lucianita”

Por fin, después de varios años de espera, el ingenio “Lucianita” de la mina Huanuni estuvo en condiciones de funcionar. Costó hasta ahora alrededor de 80 millones de dólares, pretendiendo procesar 3 mil toneladas de estaño al día. Previamente realizaron varias obras complementarias, gastos e inversiones con poco resultado. Pero la deficiencia más grave fue que el ingenio fue construido sin prever la dotación de agua para su funcionamiento, por lo que se tuvo que resolver ese problema construyendo una represa, recién entregada.

Aparentemente, todas las dificultades estaban resueltas. La Empresa Minera Huanuni recibió de la Sociedad Accidental Huanuni el dique de la presa de Wila Kollu, localizado en inmediaciones de la población de Venta y Media. El costo de esta obra llegó a 119 millones 990 mil bolivianos y deberá durar veinte años. Cumplida esa obra, la gerencia de la empresa procedió a la acumulación de agua y a realizar las pruebas respectivas. Había llegado el Día D.

Pero al realizarse la primera prueba, en el nuevo sistema hidroeléctrico se produjo una falla eléctrica que dio al traste con todas las esperanzas para que “Lucianita” entre en funcionamiento. Al parecer, todo el sistema de transmisión eléctrica del ingenio quedó carbonizado y deberá ser sustituido.

Junto a esa cadena de tragedias, la mina Huanuni arrastra otros problemas. En primer lugar, la caída de la cotización internacional del estaño, de 9,60 dólares la libra fina a 8,40 dólares, aspecto de difícil solución. Pero eso no es todo, ya que el juqueo, o hurto de minerales, tiene alcances catastróficos, pues el robo de mineral este año pasó de los dos millones de dólares al mes, lo que suma 25 millones de dólares al año. A esa caída de los ingresos se añade la deuda impaga de Vinto, que gira alrededor de 35 millones de dólares.

Por si fuera poco, Huanuni tiene que pagar regalías a la gobernación de Oruro y, además, enfrenta la cuestión de los supernumerarios, que giran alrededor de los 3.500, cantidad que se redujo de cinco mil con costosas indemnizaciones.

Las dificultades no terminan. Huanuni deberá encarar cuatro proyectos inconclusos: el ingenio “Lucianita”, el sistema de recirculación de agua al ingenio y el dique propiamente dicho, con su neutralizador. En todo caso, es de esperar que tantas calamidades encuentren solución, de tal forma de terminar la época de los “elefantes blancos”.