Cinco años de cárcel para policía que mató a Jonathan Quispe

El teniente de Policía Cristian Casanova Condori, acusado de homicidio por haber disparado contra el estudiante de la Universidad Pública de El Alto (Upea), Jonathan Quispe Vila, fue sentenciado a cinco años de cárcel; la familia del victimado expresó su indignación y anunció que apelará la sentencia, mientras que la universidad se declaró en emergencia.

El fiscal a cargo del caso, Rudy Terrazas, explicó que el oficial de Policía habiendo admitido responsabilidad plena y total sobre la muerte del universitario se acogió a procedimiento abreviado, en audiencia realizada a las 08.30 de la mañana de ayer el Juez Cuarto Cautelar de El Alto, dictó la sentencia condenatoria que debe terminar de cumplir en el penal de San Pedro de La Paz.

“La Fiscalía ha solicitado la aplicación de esta salida alternativa establecida dentro de la normativa. (… Casanova), estaría a diez meses de cumplir la sentencia dispuesta”, refirió la autoridad del Ministerio Público.

El rector de la Upea, Freddy Medrano, lamentó que el Ministerio Público no actuara de acuerdo con la norma, siendo que los querellantes en el juicio contra el teniente Casanova no fueron notificadas, hecho que generó sospechas sobre la actuación del juez y los representantes del Ministerio Público.

“La Upea rechaza ese hecho porque no ha sido notificada de manera formal, como corresponde, para la audiencia de esta mañana. La Upea se declara en estado de emergencia ante esta temible actuación y no quisiéramos pensar que con esta medida se pretenda encubrir el crimen que ha sufrido el compañero Jonathan”, señaló la autoridad académica.

Medrano exigió al ministro de Gobierno, Carlos Romero, cumpla su palabra de permitir un proceso legal y justo y “no ser parte de una sentencia amañada y clandestina cumplida entre gallos y medianoche (…) en el supuesto de ser un universitario el responsable le hubieran dado 30 años de sentencia”, cuestionó.

Según declaraciones de la abogada Paola Barriga, patrocinante de la familia Quispe Vila, la sentencia dictada es una burla contra la familia del victimado que expresó su indignación.