originado una disputa entre la Federación Boliviana de Fútbol, que regenta a la División Profesional, y FABOL que aglutina a los futbolistas profesionales. No se ponen de acuerdo, porque los jugadores quieren cobrar , en algunos casos la totalidad de marzo, mientras la FBF pretende pagar al menos un 50 por ciento, porque la competición se suspendió. Incluso, el Consejo de Presidentes decidió negociar con los jugadores sin FABOL, algo que no aceptaron los futbolistas que se sienten respaldados por su agremiación. Los clubes ya advirtieron que bajo la actual coyuntura no están dispuestos a seguir adelante, y en algunos casos, hasta amenazaron con licenciar a sus jugadores. Entre hoy y mañanahabrá novedades en torno a nuevas movilizaciones.