Fracasos en proyectos de Comibol

Desde el 22 de febrero de 2006, en que asumió el gobierno Evo Morales hasta su renuncia el 10 de noviembre de 2019, pasando por la asunción de Jeanine Áñez como Presidenta interina el 12 de noviembre de 2019, recién el 8 de mayo de 2020 (pasados más de 14 años) se nombró como Ministro de Minería y Metalurgia al Ing. Fernando Vásquez, un profesional minero calificado.

La semilla minera plantada por los gobiernos anteriores al del MAS para la atracción de inversiones extranjeras, hizo que éstas intensificaran los trabajos de exploración en la década de 1990, que remató en 3 grandes operaciones mineras en 2007, 2008 y 2009, como nunca había ocurrido, que fue disfrutada plenamente por el gobierno del MAS. Esto sumado al fuerte incremento del precio de los minerales provocó un boom, en que se relegó totalmente la exploración, al imponer medidas anti inversión que mencioné en varios artículos. La caída de los precios de minerales, que se intensificó desde marzo de 2020 (excepto de los del oro y la plata), colocó a la minería en una difícil situación, que inevitablemente rematará en una fuerte crisis.

El boom hizo que se desarrollaran proyectos sin estudio alguno, que significaron un fracaso y un notable derroche económico en un país pobre como el nuestro, que exigen auditorías técnico-económicas (TE), que vengo sugiriendo (sin ser escuchado) desde años atrás. Ahora que está a la cabeza del sector el Ing. Vásquez, vuelvo sobre algunos proyectos de Comibol, que remataron en 4 fracasos y 1 rumbo a ello, en los que hay que tomar las acciones correspondientes.

Ingenio Lucianita de Huanuni

Pésimamente construido por la empresa china Vicstar Union Engineering con un costo de 50,3 M$us, fue inaugurado en febrero de 2015 y no funcionó desde entonces. La supervisión estuvo a cargo de la novata y muy cuestionada empresa boliviana CA Duch con un costo de 2,5 M$us, que no hizo notar la mala calidad de equipos, mal diseño de la planta, etc., etc. El pésimo trabajo realizado exige un informe de auditoría TE, para establecer los procesos y cargos respectivos. Lo mismo vale para el dique de colas, construido por Sociedad Accidental Huanuni por 16,3 M$us que no se utilizó hasta ahora. La producción de Huanuni está en continuo descenso desde 2010. Por ello también se debe determinar sus pérdidas que ahora deben ser enormes.

Ingenio de Colquiri

La producción de estaño y zinc de Colquiri empezó a caer notoriamente desde 2017, por el agotamiento del yacimiento, por lo cual pienso que está trabajando a pérdida. El actual ingenio procesa unas 1.200 toneladas por día (tpd); el nuevo procesará 2.000 tpd, que solo agotará más rápidamente el yacimiento. La construcción del nuevo ingenio fue adjudicada en abril de 2019 a la empresa Carlos Caballero por 72,3 M$us y la supervisión a Therconsult por 2,4 M$us. Colquiri y Comibol deben demostrar la factibilidad de esta inversión y que existen las reservas necesarias, así como el costo de las chimeneas de ventilación y del nuevo dique de colas, que un especialista estima en 10 M$us. Se debe evitar otro elefante blanco como el ingenio Lucianita.

Fundición de plomo-plata de Karachipampa

Cuestionada fundición terminada de construir en 1984. A pesar de ser muy pequeña y, por tanto, poco competitiva económicamente, por falta de concentrados de plomo-plata no se la puso en marcha. Por la elevada producción de estos concentrados en la mina San Cristóbal, se la reacondicionó y empezó a funcionar en 2013. Su producción anual proyectada para un tratamiento de 51.131 toneladas, fue de 194 TMF de plata y 21.691 TMF de plomo. Entre 2013 y 2019 produjo un promedio anual de 4,55 TMF de plata (2,3% de lo proyectado) y 488 TMF de plomo (2,2%), cifras y consideraciones que ahorran cualquier comentario.

Fundición de bismuto de Telamayu

Según la Ley de Minería No 535 (28/05/14), esta planta no figura entre las empresas dependientes de Comibol, aunque volvió a funcionar en 2008, cuando el precio del bismuto era de 11,24 $us/LF, que continuamente fue bajando hasta el actual de 2,50 $us/LF, por lo que su producción fue nula en 2019. La producción proyectada fue de 1 TMF/día, digamos unas 340 TMF/año. Entre 2008 y 2019 produjo 428 TMF, vale decir un promedio anual de 36 TMF o el 11% de lo proyectado, con tendencia a volverse cero. Está trabajando con fuertes pérdidas que deben ser determinadas y tomar las medidas correspondientes.

Fundición de estaño de Vinto

Empezó a operar en 1971 como Empresa Nacional de Fundiciones (ENAF). Debido a su mal manejo administrativo entre 1980 y 1985 acumuló pérdidas de 354 M$us. El DS No 21.060 (29/08/85) dispuso la disolución de ENAF, su traspaso a Comibol y su pasivo se transfirió al Tesoro General de la Nación. Desde entonces se la denominó Empresa Metalúrgica Vinto (EMV). Su reestructuración hizo posible que obtuviera utilidades desde 1989 hasta 1999, en que fue adquirida por Allied Deals, que la vendió a Comsur en 2002 y el gobierno del MAS la nacionalizó en 2007.

Compró el moderno horno Ausmelt con capacidad anual de producción de 18.000 toneladas de estaño metálico, que tuvo un costo total de 40 M$us. Este horno en 4 m2 hace el trabajo de 4 hornos reverberos y 2 fumingen un área 230 m2. Empezó a operar en febrero de 2015, produjo un máximo de 13.038 TMF en 2016 y bajó a 11.476 TMF en 2019, lo que aumentó bastante su costo unitario de tratamiento. Nunca alcanzará su capacidad máxima porque por el agotamiento de los yacimientos, cada vez se produce más concentrados de baja ley que son tratados en la fundición particular Operaciones Metalúrgicas S.A. (OMSA) que aumentó su producción. Una fundición con horno Ausmelt con capacidad anual de 40.000 TMF operó en Perú con 220 trabajadores. Según una memoria anual de 2016 la EMV tenía 480 trabajadores.

A pesar de que esta empresa siempre publicó elevadas utilidades, este año se supo que no amortizó en su totalidad el Ausmelt, que es deudora de FINPRO de 20 M$us que ya se debió pagar en 2019. También se informó que la EMV debe por provisión de concentrados a las empresas Huanuni y Colquiri, a cooperativistas y a comercializadores. El Sindicato de Trabajadores Mineros de Huanuni reclamó el pago de 40 M$us, que se arrastra de años anteriores. En abril un ejecutivo de la COB pidió al gobierno una inyección económica para que la EMV pueda pagar sus deudas y seguir operando. La historia se repite, la EMV requiere una reestructuración que será facilitada por las ventajas del horno Ausmelt.