Quema de vegetación aumentó contaminación del aire paceño

Lejos de la tradición, primó la mala intención de provocar inquietud durante la noche de San Juan en la urbe paceña, las fogatas bajaron en cantidad, pero las zonas con bastante vegetación fueron incendiadas con el efecto de mayor contaminación ambiental en la sede de Gobierno.

Los controles por la llamada “noche más fría del año” se realizaron hasta la madrugada del miércoles, con 500 funcionarios municipales por distintos puntos de la ciudad; se presentaron algunos incendios provocados que fueron sofocados.

Pese al llamado de autoridades a la corresponsabilidad ciudadana y advertencia de sanciones, muchas personas desobedecieron las normativas sanitarias y utilizaron juegos pirotécnicos. El control de la Municipalidad tuvo refuerzo de la Policía y Fuerzas Armadas, desde las 18:30 horas del martes.

El efecto fue la subida en 26%, respecto al año pasado, de la contaminación del aire de La Paz a consecuencia del fuego provocado en zonas con pajonales, según Álvaro Blondel, secretario Ejecutivo de la Alcaldía.

“Estos operativos son para controlar y prevenir de manera inmediata las fogatas e incendios de pajonales. También acudimos a la conciencia de la ciudadanía porque no puede ser que en plena pandemia en la que nuestra salud está expuesta, haya personas que contaminan el medioambiente”, afirmó el director de Gobernabilidad, Francisco Cordero.

En uno de los operativos coordinado por subalcaldías, Intendencia y las fuerzas del orden, se recorrieron 10 barrios en el macrodistrito Cotahuma donde había riesgo de quemas debido a sus abundantes pajonales, esto fue en la avenida Julio Téllez, en la cabecera del parque Laka Uta y el barrio 8 de Mayo.

En el Bosquecillo de Pura Pura, sector Cusicancha y Panticirca, se reportaron varios incendios menores que fueron controlados en más de cuatro horas por funcionarios de la Subalcaldía Max Paredes y el Grupo Especial de Reacción Inmediata.

“Como pueden ver, delincuentes han realizado varios incendios en estos lugares que en muchos casos son inaccesibles. El equipo de respuesta inmediata está conteniendo el fuego con las mochilas fumigadoras de agua en este sector que tiene alrededor de tres hectáreas”, explicó el subalcalde de Max Paredes, Juan Carlos Sandoval.

Durante la mañana del miércoles, miles de ciudadanos tuvieron que soportar las molestias para respirar, sumadas a los resfríos de la temporada y el uso obligatorio de barbijo para evitar contagios del Covid-19.