El Ministerio Público confirmó este miércoles que hubo sobreprecio en la adquisición de los 170 ventiladores españoles de marca Respira, y que el mecanismo utilizado por los imputados fue el desmantelamiento de los equipos, para poner un costo a cada kit.
El fiscal del caso, Omar Mejillones explicó que, de acuerdo con la entrevista realizada al dueño de la empresa fabricante de los ventiladores, GPA Innova, se confirmó que todo el equipo fue vendido en 6.600 euros (unos 7.400 dólares al cambio de hoy), pero el exministro de Salud, Marcelo N. presentó la factura que señala 28.080 dólares por cada equipo.
“Sí, evidentemente existe un sobreprecio porque el dueño de GPA Innova ha señalado que ha vendido todo el kit en 6.600 euros, un ventilador pulmonar básico, y la factura que el exministro ha presentado asciende a 28.080 dólares por equipo”, apuntó.
El 27 de mayo de 2020, la Fiscalía inició un proceso contra el exministro de Salud, Marcelo N., y otros exfuncionarios de esa cartera de Estado, además de dos técnicas del Banco Interamericano de Desarrollo y un empresario.
MOSTAJO
El fiscal del caso, anunció que el embajador de Ciencia y Tecnología, Mohammed Mostajo, fue citado para la próxima semana por este caso porque se conoce que estuvo implicado en las gestiones de los equipos adquiridos con sobreprecio, empero días atrás se conoció que éste se encuentra en Estados Unidos.
EXMINISTRO
Consultado por la participación del exministro de Salud, la autoridad del Ministerio Público señaló que su responsabilidad recae por hacer efectivo el proceso de contratación que estuvo direccionado, sin tener ningún tipo de respaldo técnico.
Mejillones precisó que se hizo un pago anticipado de 250 mil dólares para la adquisición de los ventiladores, antes del proceso de adquisición.
“En todo caso suponemos que también tendría que haberse beneficiado por algún monto de dinero”, apuntó.
A través de una nota de prensa, en días pasados, IME Consulting, firma que proveyó los ventiladores, afirmó que había realizado el anticipo con su dinero, porque contaba con el compromiso de buena fe para que el Gobierno de Bolivia compre los equipos.
El fiscal apuntó que IME Consulting nunca se dedicó a realizar este tipo de negocios ni conoce de este tipo de ventiladores pulmonares.
Asimismo, Mejillones apuntó que la investigación tiene un 90% de avance y que falta tomar declaraciones a algunos involucrados como, Luis Buscarons, del BID, quien debe explicar por qué dio la “no objeción” a la compra cuando había irregularidades.