Enfermos por dinero y poder

Alcides Arguedas es autor del ensayo Pueblo Enfermo (1909) y la novela Raza de Bronce (1919), literatura y política de carácter indigenista. A su turno, el autor relata los males existentes en nuestra sociedad y expresa su indignación por el despotismo practicado por los colonizadores en contra los indígenas. Después de un siglo, la historia se repite con otros actores.

En tal sentido, referiré la “indignación” que sentimos cuando nuestro pueblo es maltratado por una casta de enfermos por dinero, poder y cocaína, durante los últimos 15 años.

El Nº 1 es el prófugo de la justicia boliviana, quien en enero pasado ha invertido 1.5 millones de dólares en una quinta de San Isidro, la zona más cara de Buenos Aires, comprando vehículos blindados, contratando personal de seguridad, servidumbre y demás, donde vive con lujos y comodidades de un capo de la droga. (Fuente: La Nación de Buenos Aires 29.1.20). Durante sus años como Presidente en Bolivia, se ha apropiado al menos de 1.200 millones de dólares, del bolsillo de los bolivianos. Como damnificados, no podemos ocultar nuestra rabia cuando se hace el moralista, inocente, demócrata y se ríe en nuestra cara, insultando nuestro intelecto. Recordamos que ante el mundo amenazó con hacer desaparecer al capitalismo, a la ONU y OEA. A campesinos e indígenas los convenció de que para vivir bien, un hospital es menos importante que una cancha de fútbol, los sobornó con migajas, para idiotizarlos. Al pueblo le dijo “no estudio en la universidad porque eso se llama perder el tiempo”, como era inculto dio su mejor excusa.

Con razón estampó su firma en al menos 10.000 leyes y decretos, argumentando que él “le metía nomás” y sus abogados tenían que ocuparse de la legalidad de esos documentos. El escritor Alfredo Rodríguez Peña ha relatado más de 3.000 Evadas de evo, para demostrar su idiotez. Entonces, ¿qué pudo suceder con nosotros para que con descaro haya administrado tanta delincuencia organizada?

El cártel tiene tres niveles: El primero compuesto por los más allegados, que trabajaron 10 a 14 años con el “indiecito”; con lucros personales entre 500 a 1.000 millones de dólares. Al respecto, podemos citar al matemático y su hermano Raúl, a Quintana, Romero, Arce C., Zabaleta, al “gringo”, etc.

En el segundo nivel hay tajadas de 20 a 500 millones de dólares. Se tiene allí al resto de ministros y colaboradores, ejecutivos del BCB, YPFB, Aduanas, Impuestos Internos, Zares de la coca, Alto mando de las FFAA y Policía, banqueros, legisladores oficialistas, jerarcas del Poder Judicial, etc.

En el tercer nivel hablamos de tajadas de 1 a 20 millones de dólares, donde están gobernadores, alcaldes, bartolinas, dirigentes de Conalcam, de la COB, cooperativistas mineros, gremiales, cocaleros, dirigentes de Juntas Vecinales y otros. En resumen, ellos son los que mataron y robaron sin descaro y nada queda claro.

El supra poder del narco Estado, con ingresos superiores a los 1.000 millones de dólares, está compuesto por cárteles internacionales, grandes cocaleros, fabricantes y traficantes de cocaína. Este nivel tiene una escala reservada en altas esferas del narcotráfico internacional.

En el primer semestre de 2020 reaparece la fuerza del mal, el “indiecito”, el chuqueado y la Copa muestran obsesión compulsiva por la riqueza y poder. Con el dinero que poseen pueden comprar su inocencia, dirigen a 5.000 sicarios foráneos y nacionales para sembrar miedo y caos en todo el territorio. Nos han robado ya, pero no nos dejan vivir en paz. Dizque quieren recuperar la democracia, pero sería retornar a la economía del atraco. Más cinismo, imposible. Dios nos libre de otra desgracia similar a la del pueblo venezolano.

En cuanto a otros “enfermos”, de trayectoria desconocida, se trata de novatos que asaltan algunos ministerios, cargos ejecutivos en BoA, Entel, YPFB, INRA y otros. Éstos son parientes o amigazos del Ejecutivo, fueron sorprendidos con las manos en la masa con un monto aproximado a 1.5 millones de dólares, que debían repartirse entre 50 malandrines. Los más “indignados” son los azules del Legislativo, razones tendrán. El pueblo permanece desconsolado…

Por otra parte, el buen estratega político Tuto Quiroga presenta la alianza del extinto MNR, MPS, restos del MIR y cenizas de ADN, formando la sigla LIBRE 21, ¿qué podemos esperar de gente requemada? A los demás candidatos da pereza nombrarlos siquiera.

A la presidenta Jeanine Áñez le sugiero renunciar a su candidatura, encarcelar a todos los delincuentes que siguen maniobrando, cerrar el parlamento o, en caso contrario, que sean renovados el Órgano Judicial y Tribunal Constitucional Plurinacional. De no ser anulada la sigla del MAS para futuras elecciones, que se conforme otro Tribunal Supremo Electoral. Que se nombre ministros con decisión y oficio. De esa forma pasará a la historia de los héroes y el pueblo se lo agradecerá. Bolivia, tumba de tiranos. Morir antes que esclavos vivir.

El autor es Docente Universitario.

almamor2003@hotmail.com