Reacción delictiva contra restricciones

Las protestas de pobladores contra una ley municipal que mantenía la cuarentena rígida y restringía las actividades comerciales derivaron en acciones delictivas que convulsionaron al municipio de Punata en el departamento de Cochabamba, impulsado por intereses políticos.

Según Erbol, las movilizaciones comenzaron desbloqueando los principales puntos de ingreso a la población ubicada en la región del Valle Alto y fogatas formaban parte del tenso escenario.

En videos difundidos en redes sociales y portales informativos regionales se evidenció que los movilizados ingresaron hasta dependencias de la Alcaldía, en este caso la Intendencia, donde exigieron que se les deje trabajar.

Las puertas del antiguo edificio fueron abiertas a patadas y también se quebraron vidrios. Un funcionario reportó un equipo de computación dañado resultado del tumulto. Más tarde se supo que algunos servidores municipales terminaron agredidos con contusiones.

También se observó que manifestantes apedrearon a policías que estaban frente a ellos.

Posteriormente, productores campesinos y comerciantes retomaron las calles del municipio para emprender las actividades económicas. “Con qué voy a mantener a mis cinco hijos, mi esposo solo es agricultor, dónde voy a ir a vender mis productos, dígame”, expresaba una señora vendedora ambulante de los quesos (quesillos) típicos de la región en una de las calles de la localidad.

En la plaza principal, en medio de los reclamos, uno de los jóvenes movilizados, en referencia a uno de los funcionarios locales, reclamó: “Balderrama tiene que aclarar por qué nos ha dicho que somos salvajes, él no puede sobrepasar por nuestros derechos, él no puede creerse dueño de toda Punata”.

Según informes en Punata se registraron 52 casos de coronavirus y al menos dos personas fallecieron producto de la enfermedad. También se conoció de seis recuperados del mal pandémico; aunque adicionalmente la tarde de este martes se reportaron otros cuatro recuperados.