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Apuntan a Ejército de Siria

ONU condena muerte de civiles por ataque en Idlib

> Observatorio Sirio para los Derechos Humanos afirmó que cuatro niños habían muerto por conflicto armado


FOTO DE ARCHIVO DE RUINAS POR ATAQUES ARMADOS EN IDLIB, SIRIA.

Idlib.- Naciones Unidas condenó la muerte de ocho civiles, incluidos cuatro niños y dos trabajadores humanitarios, en una serie de ataques llevados a cabo el miércoles por el Ejército de Siria en la provincia de Idlib (noroeste) y ha expresado su "profunda preocupación" por el "drástico repunte" de la violencia en esta zona del país.

El vicecoordinador humanitario regional para Siria, Mark Cutts, condenó lo sucedido "en los términos más firmes" y ha expresado sus condolencias a los familiares de las víctimas, al tiempo que ha recordado que tres millones de personas –más de la mitad de ellos desplazados internos– se encuentran en zonas de frente en la provincia.

Así, indicó que "múltiples comunidades" en el distrito de Ariha fueron alcanzadas por los ataques con proyectiles, incluidas las localidades de Ariha, Balshun, Balyun, Deir Sunbul, Ehsem, Marayan, Nahliya y Shinan, y ha agregado que esta violencia "empeora una situación ya dura sobre el terreno en Idlib, donde millones de personas necesitan ayuda vital urgente".

"El coronavirus sigue propagándose en unos campamentos abarrotados, las lluvias han empezado de nuevo y las temperaturas de invierno llegarán pronto", subrayó, antes de pedir nuevamente el fin de los combates entre las partes.

El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos afirmó que cuatro niños habían muerto en los ataques, mientras que World Vision dijo que entre las víctimas mortales había dos miembros de Ihsan Relief Development, asociada de la ONG.

Por su parte, el director regional del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) para Oriente Próximo y Norte de África, Ted Chaiban, condenó los ataques y ha agregado que un quinto niño, de cuatro años, fue asesinado hace unos días "mientras se dirigía a la escuela".

"Mientras tanto, dos trabajadores humanitarios, aliados de Unicef, murieron cuando iban a uno de los espacios amigos de la infancia apoyados por Unicef, en los que los niños pueden jugar y descansar. También se nos ha informado del ataque a una escuela", ha lamentado.

Así, ha manifestado que "hasta marzo de este año, el noroeste de Siria era uno de los lugares más peligrosos del mundo para los niños" y ha detallado que entre enero y marzo fueron asesinados 273 niños y 236 resultaron heridos a causa "de la violencia extrema".

"Es la cifra más alta de víctimas infantiles en un solo trimestre desde que comenzó la guerra. El noroeste de Siria alberga al menos a 1,2 millones de niños que necesitan ayuda, muchos de los cuales se han visto obligados a desplazarse varias veces por la violencia en otras partes de Siria", destacó Chaiban.

Por ello, pidió a las partes y "a quienes tienen influencia sobre ellas" que respeten el alto el fuego pactado en marzo entre Turquía y Rusia, que respaldan a bandos enfrentados en el conflicto. "Esta guerra, una de las más horribles de la historia reciente, dura casi 10 años de inmenso sufrimiento para los civiles, entre ellos millones de niños", dijo.

"Las armas deberían llevar mucho tiempo en silencio por el bien de todos los niños en Siria. No existe una solución militar para esta guerra. La forma de terminarla es a través de canales diplomáticos y políticos", remachó Chaiban.

La provincia de Idlib y zonas de las de Alepo y Hama se encuentran en manos de varios grupos armados, el más importante de los cuales es Hayat Tahrir al Sham (HTS). El Gobierno de Siria, respaldado por Moscú, ha defendido que la ofensiva es parte de su lucha contra el terrorismo en el país. (Europa Press)

 
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